sábado, 25 de julio de 2009

¡All right!

¡Hola! (los que hayan visto a Ignatius Farray sabrán a que viene el título...)

Hale, ya estoy aquí de nuevo,como ya os dije en la otra entrada, poner las crónicas de Jorge Blass y la de Ignatius juntas sería demasiado para algunos (incluso para mi, tengo que admitir…) así que aquí os vengo a contar esa noche tan…no se con qué palabra describirla… ¿peculiar? mmm puede que no sea suficiente…bueno, yo os lo cuento y vosotros le ponéis nombre a esto:


Llegamos a la sala Polar sobre las 21:20 o así gracias a mí, que soy una histérica y una cagaprisas (es que SIEMPRE que voy a alguna cosa de estas, SIEMPRE pasa algo o pillo TODOS los semáforos de la ciudad en rojo…) y pensé que aquello iba a estar petadito de peña pero cuando entramos para comprobar si mis predicciones eran ciertas…ahí dentro solo había cuatro monos pegados a la barra y el camarero, achín que nos fuimos (Helena, Vivi y servidora…creo que a Helena no la conocéis ¿no? porque Vivi ya sabéis que es mi compañera de batallitas, ya es veterana en este blog) a dar una vuelta. Una vuelta de 15 minutos pero que a mi se me hizo eterna…yo creo que al final volvimos a la sala porque ya no me aguantaban mas, ¿Qué queréis? Era Ignatius al que iba a ver…y bueno, dad gracias que no era Vaquero porque si no de que iba yo a dar una vuelta…vamos, llega a ser Vaquero y me tenéis a las ocho plantadita en la sala...a las ocho de la mañana, aunque la actuación empezase a las 22:00…vale, a lo mejor exagero un poco…a las ocho de la mañana a lo mejor no estoy ahí…pero a las ocho y media, seguro que si.

Pues eso, que yo creo que al final volvimos a la sala porque a mi me estaban comiendo los nervios y casi empiezo a comerme a los demás y claro, ya que tus amigas han aceptado acompañarte pues no te las vas comer, estaría feo…Así que antes de que pudiera perder el control (y ellas también porque ya se sabe que todo lo malo se pega) volvimos a la sala, a esperar que empezase el Chow. Mientras, pedimos alguna bebida para no morir deshidratadas (ahora no tiene mucho sentido que os cuente esto pero quedaros con el dato)

Pasó así como media hora y de repente vi que la gente se altero un poco y que alguien pasaba por todo el medio de la peña (Que había ido llegando poco a poco) y yo, ciega de mi, pensando “¿pero donde van?...si todavía no se puede bajar, que esta cerrado...de verdad que hay gente tonta por el mundo…” cuando me di cuenta de que esos “tontos” eran Ignatius y Gori (al que había prometido saludar, ya que en la actuación de Jorge Blass no lo hice…joooo es que me daba vergüenza…yo no tengo la culpa de haber nacido asín de tonta…)

Hay veces que me pregunto como habría sido mi vida si no existiesen las gafas ni las lentillas...porque si con ellas puestas no veo un pimiento, sin ellas ni te cuento…Si no existiesen, ese momento habría sido algo así:

Empieza a haber un poco más de barullo que de lo normal, miro al frente y…no veo nada…cierro los ojos y…ahora veo menos…los abro un poco, cual chinito y… ¿Qué pasará?:

a) sigo sin ver una mierda

b) veo que algo se mueve y pregunto que qué es a lo que seguramente algún pasota me contestaría “nada”

c) paso de preguntar porque soy así de chula y hago libre interpretación (cosa peligrosa porque podría interpretar que ha entrado un atracador y propinarle una buena paliza a quien fuera, o bien, que hay un bicho por ahí suelto y entonces me pondría a gritar, saltar y correr como un pollo sin cabeza…y la sala es de dos pisos…)

A saber… ¡Bueno, no me distraigáis, hombre! Que si no, no acabo nunca…el caso es que cuando se acercaron un poquito más pude distinguirles y claro, me dio el subidón. Media hora después (a partir de ese día, cada vez que vaya a esa sala voy a ir media hora después de la prevista…y seguro que aun así, llego pronto…) bajamos… ¿os he dicho alguna vez que odio las escaleras? Es que siempre, SIEMPRE que tengo que subir o bajar escaleras en un sitio público, SIEMPRE me tropiezo o pierdo el equilibrio…es como si, al ver una escalera, en mi cerebro se activase una alarma en plan “¡MEC! ¡MEEC! ¡Alerta roja, alerta roja! ¡Escalera a medio metro!” (Si,”mec, meec” ¿Qué pasa? Es mi alarma y suena como me da la gana…)… ¿Por qué no las ponen mecánicas? Pero de las planas, porque si hay escalones me va a dar lo mismo, me voy a esmoñar igual…

Lo jodido es que iba con el botellín de cerveza en ristre, así que ya os podéis imaginar mi cara de pánico…mientras bajaba iba pensando “como me caiga…madre mía…como me caiga, ducho al de delante…” pero no, llegué sana y salva…por los pelos….Así que pillamos una mesa donde Helena dejo su botellín (quedaros también con el dato) y pillamos sillas para estar sentadicas (…Efectivamente, Marina, las sillas son para sentarse…no, si cuando yo digo que soy tontica es que soy tontica…) pero tuvimos un problemilla con una de ellas…el problema es que estaba delante y teníamos que cogerla por los aires para ponerla en nuestro lado…y ahora es cuando entra en acción el botellín de Helena y en unos segundos el mío. La consecuencia de tener alzada una silla justo encima de una mesa con un botellín que contiene liquido es, claramente, que una de las cuatro patas de la silla, por cojones, lo va a tirar…y así fue, al final la que duchó al de adelante no fui yo…pero eso es lo de menos, eso no es lo peor, ahora es cuando realmente demuestro que soy tonta…pero con ganas. No se qué narices se me pasó por la cabeza que decidí ayudar a Vivi a poner la silla en el suelo…sin soltar el botellín…si amigos, habéis leído bien, no dejé el botellín en la mesa y luego ayudé con la silla, no…Lo se, estúpido, MUY estúpido…es como cuando te preguntan la hora y tu vas a mirarla sin darte cuenta de que tienes un vaso con líquido dentro…pues esto fue igual, fue mi pequeño homenaje a las cataratas del Niágara…Aunque segundos después alguien rompió una silla así que ya no me sentí tan estúpida. Bueno, y después de este pequeño percance y después de otra media hora por fin salió Gori a presentar a Ignatius y ahí ya comenzó la juerga padre. Madre mía, Carolina (que ya me había advertido de lo que me esperaba) (por cierto, su blog esta en la lista de Webs chulas por si os queréis pasar, está fenomenal, os lo aseguro) tenía razón, ¡Ignatius está loco! Pero es mas majo que las pesetas…está más salido que el pico de una mesa, pero es muy majo…

Pues eso, después de un buen rato partiéndonos la caja, hizo un descanso…de media hora…jajajaja no, en realidad no se cuanto duró pero se hizo bastante largo...Y volvió ¡al ataqueeerrl! Participando con el público…o al revés, no se. Podría contaros un montón de cosas del monólogo pero entonces si que no acabo nunca, así que quien quiera saber algo de esp, que me lo diga y yo se lo cuento de mil amores.

Al final nos acercamos a él (nos saludo con dos besos,cosa que ni Vaquero,ni Nacho García han hecho,verdad...y eso que con Vaquero ya deberia haber confianza...a ver si vas a estar perdiendo facultades,colega...) y nos hicimos una foto y hablam…hablé un poquitín con él (sorprendentemente, sin tartamudear ni nada…parece que voy cogiendo soltura en esto de hablar con cómicos...o confianza,no se…) y ahí es cuando me di cuenta de que es mu’ majete y que bajo los focos se suda mucho…pobre hombre,estaba hecho una sopa...Y después de hablar con él, hablé con Gori, que ya me había saludado antes y ya quedamos en quedar (valga la redundancia) otro día que no esté él trabajando.

Y esto es todo, mas o menos, no creo que se me olvide nada…¡Ah,si! ¡La foto! se nota que la ha sacado Vivi porque tengo los ojos abiertos...no como mi padre,que siempre me saca "grogui":

(De derecha a izquierda: Helena,Ignatius Farray y yo con mi felicidad habitual...)


El lunes me voy de vacaciones de nuevo, a Huelva no, tranquilos, esta vez a Gandía. No se si me llevaré el portátil pero no os aseguro que vaya a actualizar, así que si os aburrís...pues leed las anteriores entradas (que seguro que no habéis leído todas…yo os recomiendo las mas antiguas, porque este blog ha ido decayendo poco a poco…) y echadme de comer algo a los peces, anda.

Por cierto, he puesto un contador de visitas y al parecer hay mas vida por el ciberespacio de la que yo pensaba (gracias por la idea, Gato) lo cual, significa que, salvo 2 o 3 personas mu’ echás pa’lante y mu’ majas, los demás sois una panda vagos que, o bien al ver tanto texto dais corriendo al botón de “pa’tras”,o bien no queréis firmar solo Dios sabe por qué razón…achín que ya no tenéis escusa para no dejar un pequeño recuerdo en este blog por muy simplón que sea porque…(susurrando) os estoy vigilandooo…

¡Besetes para todos!

2 comentarios:

Viviana dijo...

UUUU q subidón.... te faltan cosas ¬¬ ¬¬ yo como siempre muy crítica jajaja. LO de q tienes miedo de bajar las escaleras cn una beebida me parece muy fuerte! xq yo estaba acojonada xq tenia q bajar 3!!! y encima una rubia tonta no se quitaba del medio XD pero bueno da igual. X cierto se q cada uno tiene su propio politono para la sirena de emergencia... pero trnca q cutre XD... Es broma es broma. Sabes como sonaría la mia?? aaaahhhhhhh (te dejo q interpretes o que quieras XD) En Gandia seguro q lo partimoss!!! jajajaj un beste!! esta guayy guayy!!! como siempre seré tu compañera de aventuras XD ^^

el gato dijo...

Bueno,la persona,(ingenua ella:)que haya entrado en tu blog para enterarse de que coño va Ignatius,se ha quedado con el mono...de saberlo.Ahora bien,ha descubierto que como se descuide el Ignatius y otros,le quita el sitio una joven cómica en ciernes,que ni siquiera estaba en el programa!!! xD
Molan mazo tus detalles,Marina.
Otro dia,cuentas que tal la actuación... ;)
Happy Hollydays!